Conseguir un maquillaje duradero y perfecto no es fácil, pero tampoco imposible. Siguiendo una serie de pasos en tu rutina premaquillaje podrás lograr una piel perfecta y un maquillaje duradero. Lo primero de todo, antes de aplicar ningún producto, es preparar la piel con una buena limpieza, tonificación y posterior hidratación.
Una piel cuidada, sana y bien preparada para el maquillaje diario es imprescindible para que éste dure todo el día. Así que, antes de aplicar cualquier tipo de producto, como puede ser la base o el corrector, asegúrate de tener tu piel limpia e hidratada.
Siguiendo estos pasos en tu rutina facial podrás lucir una piel radiante durante todo el día, además de conseguir un efecto más duradero del maquillaje.
Realiza una buena limpieza de tu rostro
Lo mejor para empezar a preparar tu rostro para el maquillaje es una buena limpieza de la piel. Para este paso podrás utilizar leche limpiadora, agua micelar, aceite limpiador o geles. Los limpiadores ayudarán a eliminar cualquier resto de suciedad y contaminación depositada en la piel, además, de prepararla para los productos de maquillaje. Eso sí, recuerda utilizar opciones suaves con el objetivo de evitar el enrojecimiento de la piel. En caso de pieles sensibles, será recomendable emplear alguno específico.
No hay que olvidar que cuando la piel no está correctamente limpia se ve más apagada, además, la acumulación de partículas puede promover que tu piel presente una textura más irregular o con imperfecciones.
En nuestra gama Hi Sensitive contamos con un Gel Limpiador Micelar que te ayudará a tener una piel limpia como primer paso antes del maquillaje. Este gel es apto para pieles sensibles y te ayudará en la limpieza diaria, gracias a su fórmula con tensioactivos suaves de origen natural, además de eliminar los restos de maquillaje y las impurezas de la piel.
Durante la limpieza facial podrás utilizar, de forma simultánea, un exfoliante para la cara. Ahora bien, es importante saber encontrar el tipo de exfoliante adecuado para cada piel ya que no todas son iguales y no necesitan la misma frecuencia de exfoliación. Por eso, la sobre-exfoliación puede llegar a generar irritación y sensibilización de la piel. Así, es recomendable hacer una exfoliación de la cara máximo tres veces a la semana.
El tónico es un paso importante
El siguiente paso para preparar la piel es aplicar un tónico específico para cada tipo de piel. Además, para las pieles sensibles es mejor emplear un tónico sin alcohol, evitando enrojecer la piel. Los beneficios del tónico para la piel son diversos:
Acaba con los restos de suciedad del cutis
Elimina impurezas
Minimiza el aspecto de los poros
Aporta equilibrio
Refresca la piel.
También ayuda a restablecer el pH de la piel y a controlar la grasa del rostro.
No te olvides del sérum
Un gran olvidado de las rutinas de preparación de la piel es el sérum, el cual se ha vuelto muy popular entre las personas que buscan un maquillaje natural y de larga duración. El sérum tiene la función de potenciar los efectos de los productos anteriores, pero también puede tener una acción antiarrugas, revitalizante e iluminadora.
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